LA VIRGEN DE LAS ROCAS ( Louvre )
El estado de conservación de este cuadro, trasladado a lienzo en 1806 desde una tabla, es medianamente aceptable. Están mal conservados los pasajes más oscuros del paisaje del fondo, mientras que es más aceptable el estado de las figuras. La capa de pintura es bastante más delgada que la versión de Londres-Fué originariamente un encargo de la cofradía milanesa de la Inmaculada Concepción de la Virgen, para una capilla de la iglesia San Francesco Grande de Milán. El cuadro de Leonardo era la figura central de un gran retablo de altar. La tabla estaba flanqueada por dos cuadros de ángeles músicos pintados por Ambrogio de Predis. Una vez terminad el cuadro surgieron diversos problemas que dieron lugar a veinte años de pleitos.
La version parisina tuvo que ser vendida, regalada o confiscada en los años posteriores a su terminación, pues de no ser así, no hubiera sido necesaria una segunda versión. Es posible que los pintores hubiesen vendido de hecho el cuadro a otro comprador y que hubiesen realizado una copia - la londinense - para la cofradía. También es probable que Ludovico el Moro se hiciera en 1485 o poco después con la primera versión del cuadro, destinada a San Francesco, para exponerla en San Gottardo a Monte. Según esto, la segunda versión se inició inmediatamente en sustitución de la primera adquirida por Ludovico. A su vez, Luis XII pudo haber confiscado en 1489 la primera versión, que se encontraba ya en Francia mucho antes de 1570.
La iconografís de la tabla de Leonardo se explica por la constelación de las figuras, que debe interpretarse en el sentido de una Virgen protectora en cuanto figura identificatoria de la cofradía franciscana, san Juan Bautista se encuentra bajo la proteccion de la Virgen y adora al Niño, que al mismo tiempo lo bendice. Tanto san Juan, como el paisaje rocoso deben interpretarse como una referencia a determinados aspectos de la espiritualidad franciscana, pues la estigmatización de san Francisco se produjo frente a una montaña hendida.
Dos dibujos originales de Leonardo conservados en el castillo Winsor y en Turín pueden considerarse como estudios preliminares directos de la Virgen de las Rocas. Así mismo en dos páginas del códice Arundel 253v - 256r aparecen bocetos de la cabeza, del pié derecho y de la mano izquierda de san Juan Niño.
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